Con un corazón tan grande como su belleza, la cual utiliza hábilmente para seducir a los viajeros ebrios de fiesta con el único fin de ofrecerlos en sacrificio al inframundo. La Xtabay habita en el sureste de México dando vida a esta leyenda que se niega a morir.
Me gusta el poder reinterpretar historias que escucho en mis viajes y poder representarlas de una manera atractiva para darle forma física a aquello que sólo escucho en palabras.